viernes, 12 de octubre de 2012

EN RECUERDO DEL MAESTRO FAUSTO LUQUE · LAS INCONGRUENCIAS DE UN CACIQUE · COROLARIO.- ¡Que ya se termine esta racha¡


Pues otra mala noticia pero ahora en el ámbito magisterial, es la de que el compañero maestro FAUSTO LUQUE también el día de ayer dejó de existir. Con ello, la educación física federalizada pierde un gran elemento caracterizado por su vocación académica y su compromiso por mejorar esa importante área educativa. Curiosamente, aún siendo inspector nunca tuvo el menor empacho en expresar lo que pensaba y siempre se mostró valientemente crítico de lo que él consideraba nocivo para el trabajo educativo. En su memoria, y contando con la anuencia de su equipo cercano de amigos maestros de educación física, me permito compartir una nota que me envío pidiéndome la publicara y que por diversas razones no me había sido posible. El título de su nota es “LAS INCONGRUENCIAS DE UN CACIQUE” y dice así: Escuché en un noticiero local de televisión hace unos días, una declaración del cacique magisterial Liberato Montenegro Villa, quien categóricamente opinó que no debería aplicarse la evaluación universal a los maestros de educación básica de la Secretaría de Educación Pública del Estado de Nayarit (SEPEN), e incluso, con falsa modestia, enfatizó que vertía su opinión como “ciudadano” y no como dirigente perpetuo de la sección XX o “líder moral” como eufemísticamente sus incondicionales le suelen llamar para encubrir a quien tiene el poder real del sindicato magisterial (SNTE) en Nayarit. Resulta obvio pero quiero subrayarlo, que un personaje enquistado como cacique magisterial, que opina en los medios sobre problemas relativos a la educación básica, no puede opinar como simple ciudadano, porque no puede despojarse objetivamente de su investidura –sin importar que ésta sea espuria- de dirigente charro de los profesores de educación básica de los SEPEN.

La actitud incongruente del cacique magisterial no creo que se debe a su estado de decrepitud avanzada, sino a su cinismo característico de irrespetar los convenios que a nombre  de los profesores de educación básica (cuyo parecer no es tomado en cuenta), los dirigentes sindicales vitalicios como él y Elba Esther Gordillo, suscriben con el gobierno; y a su inveterada manía de manejar de manera discrecional los asuntos sindicales y las políticas educativas, donde suele incurrir en posturas que solo reflejan sus intereses personales y los de su camarilla, y no la de los maestros ni mucho menos de los de la sociedad. Su manejo faccioso y tendencioso en los asuntos públicos está siempre condicionado por su actitud patrimonialista, donde los maestros solo cuentan como borregada para ejercer presión al gobierno en turno en busca de canonjías y posiciones para su grupo de allegados.

Esto no significa que el rechazo de muchos maestros a dicha evaluación no sea válido en ciertos aspectos, pero es necesario señalar asimismo, que los maestros no nos negamos a ser evaluados porque de hecho, todos los que somos asalariados del Estado debemos rendir cuentas a los contribuyentes sobre nuestro desempeño. Tampoco me parece éticamente incorrecto transferir las plazas a nuestros descendientes directos, siempre y cuando tengan los perfiles idóneos y se cumpla una normatividad institucional de manera que no se violen derechos de terceros. No se trata en este punto de una herencia a la manera de un patrimonio físico como un bien inmueble, sino de un trato preferencial entendido como una conquista laboral sana que por cierto, ocurre en otras instituciones públicas y que desde luego debe ser regulada para evitar perjuicios. Lo que no se vale es que un sujeto enquistado en el poder sindical maneje a su antojo las plazas de los maestros, incurriendo en un tráfico inmoral e ilegal de las mismas. Lo que molesta a los maestros que honestamente hacen su chamba, es que su sindicato no sea en verdad un instrumento de lucha que defienda sus  verdaderos intereses y los de la educación de los mexicanos. Porque ambos no están reñidos entre sí, y en la práctica, son una instancia que está secuestrada por un grupo de bribones, los cuales constantemente utilizan contra su voluntad a los maestros en actividades políticas que solo benefician al cacique y a su mafia. Admito desde luego que habrá profesores sin dignidad, que no les molesta actuar servilmente con el cacique para congraciarse  buscando prebendas, en vez de ganarse ascensos de manera honesta e institucional a través de las mejoras en su formación y desempeño profesional, mismas que debieran abonar o traducirse en resultados positivos en la calidad educativa.

En esta coyuntura electoral, la conducta del CACIQUE se aprecia ambigua y oportunista, oscilando  lastimosamente entre Enrique Peña Nieto y el PANAL de Elba Esther Gordillo. Su actuación como siempre rumbo a un conocido propósito: HACER TODO LO POSIBLE PARA CONTINUAR PERPETUANDOSE EN EL PODER POLÍTICO Y SINDICAL.
COROLARIO.- Que ya termine esta mala racha le pedimos al Gran Arquitecto del universo, porque en Nayarit nadie sobra y como quiera nos acomodamos hasta en lo que a diferencias políticas se refiere. Al fin que lo político no es personal. Salud para todos y hasta la próxima. Mi correo mtreflexiones@hotmail.com